A pesar de la lluvia, no dejamos que nada nos detuviera y modificamos nuestro plan inicial para asegurarnos de que la aventura de cicloturismo a Irala siga adelante. Originalmente planificada para recorrer otros caminos, la lluvia nos llevó a optar por la variante de la autopista, pasando por Cucha Cucha y el Golf de Chacabuco.
Con una distancia total de 60 km, la pedaleada resultó ser una experiencia increíble. Todos los participantes estuvieron preparados con bicicletas en condiciones, cascos, suficiente hidratación y cámaras de repuesto, tal como recomendamos siempre desde RODABIKE.
Después de un buen rato de pedaleo, cerramos con una merienda que todos habían reservado previamente en RODABIKE. Además, con la compra de su vale, los BIKERS participaron en sorteos de órdenes de compra, añadiendo un extra de emoción al día.
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